Un regalo para ti!

En días pasados mientras transitaba rumbo al trabajo, escuchaba un audio de superación personal, y no vas a creer lo que descubrí. Después de tanto tiempo buscando el secreto, buscando la magia del éxito, entendí lo claro y cerca que siempre ha estado. 

Las personas nos pasamos la mayor parte del tiempo, por no decir todo el tiempo, viviendo hacia afuera, ¿cómo así? Desde que despertamos atendemos a la familia, dejamos listo lo que hace falta en le casa, lo que pidieron en el colegio. Luego llegamos al trabajo y cumplimos con nuestro deber, hacemos todo lo que el jefe disponga, si tienes jefe, si eres auto empleado estas peor, porque debes complacer a todos tus clientes. Si tenemos hambre y no nos alcanza el tiempo, dejamos de comer, o comemos tan aprisa que hasta mal nos cae. Termina el día e increíblemente estás tan agobiado que no quieres pensar y te aferras a la televisión para distraer, aún más tu existencia. Quisiera llamarla vida, pero no puedo, porque si analizas en tu día ¿cuánto de ese día has vivido?

Así pasan semanas, meses y otra vez estamos a final de año con muchos sueños sin cumplir. Pero cómo los vas a cumplir si en tus días jamás piensas en ti ¿Crees realmente que otro va a saber lo que tú deseas? ¿Eres tan ingenuo que piensas que alguien más se va a ocupar de hacer tus sueños realidad? Debemos dejar de ser ilusos y entender de manera consciente lo que descubrí en ese audio y que voy a compartir contigo. 

El éxito de la vida está precisamente en vivir la vida. Para ello debes tener tus prioridades claras; o lo más importante son los demás o eres tú. Debo confesarte que he vivido mi vida para los demás, porque creía que así era buena persona, pero terminaba mal, frustrada, incómoda, molesta sin saber por qué. ¿Quieres saber por qué? Simplemente porque nadie me había pedido que viviera su vida, era mi errada decisión y estaba pagando por ello. 

Entendí de una vez y para siempre que si quería que los demás estuvieran bien, no era viviendo por ellos, era sintiéndome bien yo, porque si yo estaba bien ellos también lo iban a estar. Recuerda no puedes dar lo que no tienes por más que te afanes. Tal vez estas en esta situación o has estado, créeme, nadie quiere que vivas por ellos, ni tu familia, ni tus amigos, ni tu pareja, ni tus compañeros. Entonces sin sentirnos culpables debemos dejar de vivir esta hermosa vida que Dios nos dio hacia afuera, y comenzar a vivirla hacia adentro. 

Hoy te recomiendo 3 acciones que puedes empezar a hacer hoy mismo, si es que lo decides. 

1. Tómate al menos ocho veces al día para escuchar tus necesidades. Pueden ser cuatro veces de un minuto en la mañana y cuatro en la tarde o noche. Qué te está pidiendo tu cuerpo en ese momento. No es que lo tengas de cumplir, si tienes hambre y estás en una reunión no puedes simplemente salir y abandonarla. No hablo de satisfacción, hablo de conciencia. Que tu mente diga guao, pensó en mí, yo soy importante, se acuerda que existo. 
2. Descubre qué te hace feliz y planifica en la semana al menos una actividad que se relacione con ese placer. Aunque sea una vez al mes , pero date el gusto de satisfacer lo que te hace sentir bien, vivo, feliz.
3. Este para mi es el más importante. Le exigimos tanto al cuerpo y a la vida, y siempre queremos más y más que se nos pasa por alto lo más importante. Agradecer. 

Agradece lo más mínimo: tus pulmones para respirar, el latido de tu corazón, el agua para beber. Dios mío somos tan abundantes y sin embargo, se nos pasa el tiempo exigiéndonos sin detenernos a agradecer por tantas bendiciones y por las oportunidades y proyectos que vendrán. 

Agradece por cada persona que se cruza en tu camino, o eres bendecido o eres su bendición. Realmente es tan simple que no lo entendemos. 

Se acerca un nuevo año y no hay mayor regalo que aprender a vivirlo desde adentro. Conociendo la persona que eres. Dándote el tiempo de experimentar el silencio, de escuchar tu voz interior, de analizar tus pensamientos y si, de tomarte el tiempo para pensar en ti. No en deseos superfluos, sino en lo que viene de tu esencia, de tu interior. 

Dejemos de engañarnos, aprende a vivir contigo, recuerda como es adentro es afuera. El trabajo siempre comienza en ti, dentro de ti está todo lo que necesitas para ser feliz. Tú eres tu mayor regalo. 

Licet Mesa.